Una mala lonchera puede traer problemas de fatiga y desgano que van en contra del rendimiento académico de los menores.
Una lonchera saludable debe tener indispensablemente alimentos reguladores, formadores, energéticos y líquidos.
- Alimentos reguladores o protectores (vitaminas y minerales) que consisten en frutas y verduras. Es mejor ponerlas enteras, no picadas.
- Alimentos formadores (proteínas) carnes como: atún, pollo, pavo son recomendables.
- Alimentos energéticos, como su nombre lo dice nos brindan energía, este alimento es muy importante para la etapa escolar y se puede cubrir mediante cereales, pan o tubérculos.
- Los líquidos son indispensables para la parte de la hidratación. Se puede agregar agua de fruta, agua de cebada, agua de piña, agua de manzana mientras sea natural y no industrializada.